martes, 5 de octubre de 2010

En el Presente - Relatividad

Es tarde en la noche, o demasiado temprano en la mañana... esas horas intermedias que nos acercan al amanecer, ese momento en que se insinúa la luz, aún sin verla. Un vampiro ya estaría buscando su refugio... porque el sol se acerca "¡viene del Este!" le gritaría su sobrenatural sangre.
Pero no es tiempo de vampiros esta vez, no escribiré sobre ellos... quizas algún otro día. 
Eso me recuerda que hay tanto por escribir, tanto por hacer, tanto por sentir, por amar y crear... y el Tiempo parece no alcanzar, se estira cuando no lo quiero y se acorta cuando más lo necesito, el Espacio parece volverse pequeño o ensancharse de una manera extraña. 
Los Ejes de la Realidad se están moviendo... ¿son acaso las bisagras de la Puerta que han empezado a moverse? Tal vez, mi alma se estremece de placer, de expectativa... y por qué no, tambien de cierto espanto. 
¿Cómo te preparas para recibir algo que has estado esperando toda tu vida? Algo que has anhelado aún en tus momentos más simples y en los más complejos, dime... ¿cómo lo haces?
Mi mente podría simplemente colapsar ante semejante idea... afortunadamente, no es el caso. Mi mente esta más avisada, y aunque contiene el aliento cada vez que mi corazón da un salto y mi alma navega por el Río del Tiempo... es lo suficientemente fuerte [al menos así lo creo] como para aceptar lo que viene.
Me detengo un segundo... sobre la Rama... y miro alrededor... la Vigilia Nocturna llega a su fin y pienso en lo que me lleva a escribir, éste y otros post anteriores. La respuesta es simple y contundente... testimonio, registro de algunos fragmentos que se reflejan en mi y se proyectan a través de mi desde la misma Existencia.
¿Alguien entiende lo que escribo? ¿Alguien lo lee? ¿Les sirve? No sé... a todas esas preguntas las respuestas se insinúa en mi corazón como un rotundo SI.
Pero los alcances personales de cada ser que lea, entienda y le sirva lo que aquí se expone... ah, eso es otro cantar!! 
No tengo idea... sus almas sabran qué hacer con lo que aquí se plasma. No obstante, me siento impulsado a querer saber en qué puede afectar esto a otros... y eso se debe a mi talante curioso y el afecto en particular que tengo por algunos de los que podrían leer este espejo de Existencia.
Siento amor por cada uno de ellos... no puedo evitarlo, y es un amor profundo, salvaje, celoso... jamás podría amar de manera desapegada... y saberlo me hace amarlos de una forma libre. Al menos es lo que creo. No concibo un amor puro que sea abnegado.
Ah... pero no es este el motivo de este post. Quería hablar de otra cosa, de otra cuestión... y en cierto modo todo tiene relación. Todo se conecta. Fluye... son como las ramas de mi árbol!!! Las Ramas de Ygdrassil!!! Los Nueve Mundos de la mitología nórdica... 
Y una vez más me desvío, mi corazón inquieto se despliega y corre por senderos tan extraños, tan inconmensurables... 
Relación, relativo.. relatividad... todo conectado, todo precioso, todo sagrado, el tiempo y el espacio... grande y pequeño... Mundos dentro de Mundos.. y el Espacio entre ellos.
El concepto de mi reflexión del día... una imagen vale más que mil palabras, reza el dicho. Y es cierto. Acabo de encontrar la imagen de lo que inspiró todo este reflujo de palabras.
Bajo de mi rama de un salto, sin hacer ruido y me acerco lentamente, con delicadeza a un sector en donde la hierba crece verde y alta, pastos de hojillas largas... y sobre el verde, contemplo el poderoso empuje de un Mundo que me resulta no del todo incomprensible, por cuanto es bello, delicado... y pequeño. ¿Alguien puede entenderlo y mostrarme lo que ve cuando yo veo esto? ¡Quiero saberlo! ¡Quiero escucharte! ¿No te parece hermosa la imagen? 
El observado y el observador... lo veo moverse con su trajecillo rojo, pintado de blanco y negro... reflejado en mis ojos dorados. Una vez más me pregunto... tú, que lees esto, ¿puedes contemplar la belleza de este cuadro? ¿Y de cuantos cuadros formas tú parte sin saberlo? ¿Te han apreciado como algo bello y sagrado? ¿Te das cuenta que estas allí, como yo, como mi pequeño amiguito de trajecillo rojo?
Yo puedo verte... te veo... desearía que tú pudieras verme... y que juntos hablaramos de lo que vemos.
Y, mientras "Rojillo" prosigue con su propia linea de vida... mientras su Mundo avanza dentro del  Mundo por el que me muevo... susurro en el silencio de este día que no ha hecho más que comenzar:
- Relatividad...

El misterio de aprender a ver...

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