Pasado, Presente y Futuro: Sabrina

Sentado en las Tierras Baldías, observo como se deslizan los hechos, contemplo como la constelación del Cangrejo se alza en el cielo nocturno, y reflexiono sobre los atributos que le concede a quienes nacen bajo su insignia... recuerdo que mi más reciente, aunque antigua, amiga esta protegida por sus estrellas... entonces su camino estará plagado de juventud eterna, de renacimiento constante, de intuición y fantasía.

Son sus llaves para llegar y volver al Mundo Antiguo... ahora que ha despertado y se está recuperando.

Mis ojos dorados, pues he vuelto a mi forma felina, retroceden en el Río del Tiempo y contemplo a la niña que llegó perdida y temblorosa, ansiosa y temerosa al Refugio de la Pantera... recuerdo las palabras del Ozo... "esa chica tiene algo raro, me conmueve"... y claro que era para conmoverse.

En sus ojos, como estanques de agua clara, dormitaba inquietamente el Alma de una Princesa Élfica... una criatura antigua que se había olvidado y que languidecía errante en las calles de la Ciudad de los Muertos Vivientes.

Y aún así... con su adormecido talante, era capaz de percibir el Mundo Antiguo más allá de los cuentos de fantasía, podía leerlo en las auras de quienes la rodeaban... ejercía una magia poderosa sin saberlo!!!

Recuerdo mi fascinación al escucharla hablar con su voz serena, hablando de lo que veía... 

Recuerdo mi tristeza al sentir su dolor, al sentirse abandonada por aquellos que debían haberla cuidado...

Recuerdo mi enojo al sentir su desesperación, porque pude ver, una vez más, lo que la Matrix había hecho a un Existencial...

Y también recuerdo mi estremecimiento cuando me habló de León... porque ella estuvo allí también, ambos lo sabíamos, lo sentíamos y desde ese entonces, desde aquellas palabras y sentimientos, es que nuestra amistad quedo sellada, recuperada y recordada.

Ah... pero eso fue el principio del camino para la preciosa Princesa Élfica... había mucho que hacer, años de cotidianidad que desandar, cadenas de prejuicios que romper... alas que curar... porque ella fue, es y será el Cisne. Animal Sagrado.

Así empezó todo su camino... armada con el recuerdo de su símbolo, de la forma de su Alma, empezó la larga travesía para recuperar todos sus atributos... uno de ellos, el principal, fue su Nombre Sagrado, al menos el Nombre por el que mi gente la conoció en el Mundo Antiguo...

Y así continuó la Princesa Cisne, caminando algunas veces, nadando otras, volando cuando sus alas estaban suficientemente fuertes... no obstante, y como era de esperarse, el Mundo Matrix y Aquellos quienes lo gobiernan no dejarían escapar tan valiosa presa... y por ese motivo, muchas veces la Princesa cayó, se arrastró, lloró, gritó hasta quedarse sin voz, se quedó paralizada... y volvió erguirse, tambaleante, al escuchar que otros Animales, viejos compañeros, nuevos amigos, la llamaban con voces fuertes o en silencios... Ozo, Tigre, Pantera, León, Gato... y también su Guardián, el de la Mirada Severa.

Por supuesto que había otros, pero no los conozco...

Es por todas esas voces... que ella empezó a encontrar su propia Voz... su propio resplandor, su propia fuerza y valor... día a día, noche a noche... atraviesa Pantanos de Desesperanza, Desiertos de Soledad... los mismos trayectos por los que muchos de nosotros hemos pasado para escapar de la Ciudad de los Muertos Vivientes...

Ella... cuyo nombre mortal significa "Princesa"... está renaciendo, una vez más... no sólo como presencia efímera... sino como un ser capaz de ir y venir por los Espacios Entre los Mundos... ganando solidez y potencia...

Por eso sus ojos se han vuelto mas intensos, su cabello mas oscuro... remembranzas del Espíritu que la alienta... 

Y yo, el Gato en la Rama, que la contemplo a la distancia, como un silencioso testigo... veo su larga cabellera rojiza agitarse al viento, rodeada por la aureola del Sol del Mundo Antiguo que le da la bienvenida... o es acaso su propio resplandor interno que se manifiesta como las auras que ella puede ver?

No lo sé... tal vez sean ambas cosas, de las dos formas... la Princesa se ha encontrado a sí misma.

El Regreso de la Princesa Cisne al Hogar